HOY! CONFÍA EN DIOS

¿Te sientes hoy a punto de caer? ¿Sientes que tus fuerzas no son suficientes? ¿Sientes que tus preocupaciones te ahogan o que tus cargas son demasiadas pesadas para ti? ¿Sientes que tus pies pisan en falso y resbalas con facilidad?

Hoy levanta tu mano al cielo y dile a Dios ¡Te necesito mi Dios!, Me siento débil y creo que voy a caer. Te aseguro que su mano tiene el poder para levantarte del suelo y dar firmeza a tus pasos. Dios puede y quiere sostenerte en medio de la tormenta, sobre el hielo o en medio de cualquier tempestad. No sigas confiando en tus botas, en tu equilibrio, en lo que sabes, en tus experiencia ¡HOY CONFÍA EN DIOS!

Aprende a buscar a Dios en medio de tu hielo congelado, en medio de tus incertidumbres, en medio de tus dudas y miedos. Búscalo Él esta más disponible de lo que piensas. ¡No sigas resistiendo a la ayuda de Dios!, ¡El quiere guiarte!, ¡El quiere sanarte!, ¡ Él quiere levantarte!, ¡Él quiere amarte! El hielo se derrite y se desparece, pero Dios NO! Dios permanece y no se muda.

Eso que estas pasando en este momento, pasará. ¡ Créelo ! Todo pasará mas la palabra de Dios nunca pasará. Hoy toma esta palabra y recibe fuerzas, consuelo, poder y amor de tu Padre Celestial. Hoy recibe el gozo que sobrepasa todo entendimiento humano. Hoy tu no estas destinado a caer, aunque los demás piensen que no te queda otra opción aunque este colgando en el precipicio o pisando el hielo y a punto de resbalar. Levanta tu mano ahí está la de Dios. Él te sostendrá y te levantará. Por que Dios tiene algo grande para ti y no, no te dejará caer. Levanta tu mano y deja que ÉL haga el resto. 

CONFÍA, ESPERA y CREE

Hoy... Sé que por gracia y amor he sido escogido.

El SEÑOR tu Dios te ha escogido para ser pueblo Suyo de entre todos los pueblos que están sobre la faz de la tierra.  El SEÑOR no puso Su amor en vosotros ni os escogió por ser vosotros más numerosos que otro pueblo, pues erais el más pequeño de todos los pueblos; mas porque el SEÑOR os amó… 
Deuteronomio 7:6-8 

La gracia no evalúa a las personas y su comportamiento para determinar si se la merecen o no.

La gracia, entonces, cambia la condición en la cual te encuentras cuando Dios hace por ti lo que tú no podrías haber hecho por ti mismo.

Porque aún cuando los mellizos [Esaú y Jacob] no habían nacido, y no habían hecho nada, ni bueno ni malo, para que el propósito de Dios conforme a Su elección permaneciera, no por las obras, sino por Aquél que llama, se le dijo a ella: el mayor servirá al menor. Romanos 9:11-12

La Biblia le pone mucho énfasis al hecho de que somos “pueblo elegido,” seleccionados personalmente por Dios aún antes de que el universo fuera fundado. Jesús les dijo a Sus discípulos: “Vosotros no me escogisteis a Mí, sino que Yo os escogí a vosotros’.

Recuerda que la gracia es ambas cosas: la elección que hizo de nosotros y la situación en la que somos puestos como resultado de esa elección.

Su elección de nosotros nos hace especiales, no al revés.

Hoy, por eso le alabo a él, ya que por pura gracia he sido elegido.

Gracias Señor, Porque hoy me siento elegido por tu amor. Quiero hacer honor a esa elección. En el Nombre de Jesús. Amén.

Obediencia por amor

Gracia llegó por primera vez a un internado para señoritas, donde iba a permanecer para poder estudiar en un colegio. Cuando se matriculó le dieron un reglamento por el cual las internas debían regir su conducta.

A Gracia le pareció que el reglamento era irrazonable e inadmisible; y, delante de unas compañeras internas, con enojo y en alta voz se dijo: “¿Obedecerlo? ¡Como yo quiera¡” En seguida se fue a su cuarto resuelta a no obedecer algunas de las partes de ese reglamento que a ella le parecía absurdo.

A la hora de la cena, cuando Gracia entró en el comedor, una amiga de ella la presentó con la directora del internado. Cuando se separaron de ésta, Gracia exclamó dirigiéndose a su amiga: “¡Qué mujer tan simpática! ¡Qué sonrisa tan agradable! ¡Sentía yo como que la directora me atraía hacia ella!”

Pasaba el tiempo, y la admiración y el cariño de Gracia para la directora iba aumentando, y sentía y pensaba que debía agradarla. Entonces, con sumisión, y casi sin esforzarse cumplía el reglamento; después, ya sin darse cuenta, con gusto lo cumplía por completo.

Había triunfado el amor a la directora y al internado.
—Autor desconocido.

A veces creemos que las exigencias de Dios son muy duras. Creemos que no tenemos porque obedecerlas. Sin embargo, una vez que probamos su amor, la obediencia fluye sola. Jesús nos cautiva con su amor y entonces cuando lo probamos no nos cuesta obedecerlo.

Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor.Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
Juan 15:10

Y el pueblo respondió a Josué: Al Señor nuestro Dios serviremos, y a su voz obedeceremos.
Josué 24:24

Búscate un amigo.

No es preciso que sea un hombre perfecto; basta que sea profundamente humano, que tenga sentimientos y un gran corazón.

Que sepa compartir dolores y alegrías, hablar y saber callar, sobre todo, saber escuchar, gustar de la poesía, de la madrugada, de la música, del sol y de la luna, sentir un gran amor por alguien o sentir falta de no tener ese amor, saber guardar un secreto.

No es preciso ser de primera mano, ni es imprescindible ser de segunda.

Tiene que sentir los días tristes y respetarlos. Saber renunciar en favor de alguien.

Tener un ideal, y en caso de no tener, sentir el gran vacío que esto deja.

Tener resonancias humanas, voluntad de integrarse al mundo y en caso de no ser realizado proponerse como principal objetivo, ser amigo.

Debe sentir pena de las personas tristes y comprender el inmenso vacío de los solitarios.

Sentir pena de los que tuvieron y perdieron cosas queridas.

Gustar de la sencillez de los niños. Ser Quijote sin menospreciar a Sancho.Búscate un amigo para pasear, disfrutar de la naturaleza, deleitarse con la música, leer; sentirse un ser humano.

Búscate un amigo que se entristezca con la separación, que quede conmovido y con todo el corazón desee nuestra vuelta pronto, que se conmueva cuando sea llamado amigo.

Búscate un amigo para no enloquecer, para poder contarle lo que se vio de bello y de triste durante el día, de los sustos, de las tristezas y de las alegrías.

Un amigo que sepa conversar de cosas simples, del rocío, de la lluvia, el sol, las estrellas y de los recuerdos de la infancia, a quien se diga que tal cosa es así, a quien se pueda decir cosas íntimas y hacer preguntas íntimas.

Búscate un amigo que no tenga miedo de decirte un defecto y cuando lo haga, sepa como hacerlo.

Búscate un amigo para vivir el pasado en busca de recuerdos, que sepa darse a quien merezca, que nos golpee un hombro, sonriendo o llorando, mas, que nos llame amigo.

Búscate un amigo que nos diga que vale la pena vivir, no porque la vida sea bella, sino porque ya se tiene un amigo y para no hacerlo sufrir.

Búscate un amigo que crea en nosotros, que no sea irónico, que nos sepa defender, de corazón libre y con toda franqueza, cuando somos atacados.Búscate un amigo, para tener la conciencia que todavía vive.

Proverbio 17:17
En todo tiempo ama al amigo, y es como un hermano en tiempo de angustia.

Proverbios 18: 24
El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; y amigo hay más unido que un hermano.

No es preciso que sea un hombre perfecto; basta que sea profundamente humano, que tenga sentimientos y un gran corazón.

Amor...

Amor, sí me fuí, pero no te deje para hacerte daño,te llevé siempre conmigo, y siempre estuviste a mi lado,
Amor, no entiendí tu forma de amar, desde lejos, siempre estuviste tan cerca y tan lejos, no se como retroceder el tiempo, y arreglar algunos mal entendidos por falta de comunicación,
Amor, te extraño mucho y me has dolido tanto, pero eso solo lo sabe mi almohada y mi soledad,
Amor, siempre te veo y me haces compañia, porque tú siempre estás en mis noches y mis días, pero tu no lo sabes, y no se si te importará.
Amor, no conozco abrazo diferente que no sea el que tu me des siempre en mis sueños florecientes,
Amor, dime la forma de solucionar todo, pero este miedo de que yo no exista para tí no me deja seguir,
Amor, como llegar a tí,
Amor, como hablarte sin llorar y sonreir,
Amor, como explicarte que nunca te he dejado,
Amor, como saber si tu hoy me recuerdas
Amor, como enfrentar que ahora soy un desconocido mas para tí,
Amor, como mirarte y acariciarte y volver a sonreir.
Amor, como quisiera ya tenerte aquí,
Amor, quiero atreverme, pero nunca me has buscado o acercado a mí,
Amor, que tontería escribir al viento, cuando hay tantas cosas que te quisiera decir.
Amor, nunca, nunca, te olvidé ni deje de sentir este inmenso amor por tí.

Primero yo!

Hoy me detuve en el espejo de mi baño y vi a una mujer mayor, sin sueños... Con la rutina de toda la vida y me di cuenta que me levanté 15 minutos más temprano que nunca. Me había olvidado cuando fugazmente despertaba hace unos pocos años sonriente y me animaba que ese día fuera mejor que el anterior.

Precisamente no recuerdo cuando cambió eso. Por despertar atrasada, desesperada por el tiempo, por los pendientes, empecé a no ir a los salones de belleza con la misma frecuencia porque el dinero lo ocupaba para otra buena actividad familiar. No tengo más de 35 años y me siento como de 90 años. Desesperada porque no he realizado muchas cosas, pero esas cosas ya no son los sueños de antes.

Hoy que desperté 15 minutos antes de mi vieja rutina, recordé que mi esposo tuvo una reunión de compañeros, se fue y ni me avisó, hoy recordé que mi hijo de 5 años no me obedece y el de 10 dice que soy ridícula porque no soy hombre como él y la niña de 2 años sólo me llama cuando necesita algo. Estoy segura de que todos saben que los amo pero... ¿Cómo me pueden valorar si yo no lo he hecho?

Por eso, hoy y a partir de hoy seré primero yo, y lo quiero compartir con ustedes. Levántense 15 minutos antes, mírense en el espejo y díganse a sí mismas a quien ven, ¿les gusta esa mujer o desean ser otra? Nunca es tarde, tarde sería si mueren. Ese hoy fue hace 2 años y las cosas cambiaron mucho, pero no fue fácil, por supuesto que no.

Me costó levantarme temprano para cepíllame el cabello bien y arreglarme para trabajar; renuncié a mi trabajo de 15 años (aún lo extraño) y empecé a ir al gimnasio. Los primeros meses fue un fracaso, pero luego bajé de peso, cambié mi forma de vestir y hasta mi esposo asombrado me invitó un día a una cena para preguntar si nuestro matrimonio continuaba o tenía otro amor, le dije sin pensar: sí tengo otro amor que me llena completamente y ese amor soy yo.

Y bueno que más les puedo decir, soy otra porque ahora primero soy yo. Nos pasa que de pronto un día miramos de reojo una vidriera y vemos una imagen reflejada que no es la nuestra. Sucede que al mirarnos apuradas todas las mañanas reconocemos que ya no somos las mismas y añoramos a esa mujer que perdía horas preciosas inventando un nuevo peinado, o que soportaba una crema en el cabello y lo envolvía en una toalla para que luego tuviera un brillo destacable...

Mascarillas que nos hacían lucir espléndidas, maquillajes intensos que nos mostraban a una mujer sensual y atractiva, escotes, pantalones ceñidos, tacones que endurecían nuestras piernas al andar... Un día nos encontramos recordando a aquella mujer y sentimos que la fuimos sepultando lentamente. Presenciamos su lenta agonía y no hicimos nada para revivirla.

La pareja, la familia, los niños... El gato, el perro, el canario... La casa, las compras, el trabajo... El auto, la limpieza, las camas bien tendidas, el orden... Y allí debajo una mujer que grita: ¡socorro! que se mueve con amor, con sensibilidad, con vocación, pero que dejó lentamente que todo la supere y se quedó ahí, en ese lugar viendo pasar la vida de los otros y se olvidó de sí misma. Tenemos que revivir a esa mujer y hacer que diga:

¡Presente todos los días! Primero yo, y eso no significa que soy egoísta... Primero yo, y eso importa. Intentemos recuperar a esa mujer bella que nos hacía sentir seguras, desterremos las culpas y si el desayuno, el almuerzo, la merienda o la cena se demoran un poquito porque estamos poniéndonos lindas, pensemos que ese cuidado de nosotras mismas, esa dedicación, ese amor serán la medicina mágica que hará que nuestra autoestima crezca.

Si nuestra autoestima no está bien, nada este bien en nuestra vida, y por ello dejamos que otros nos desvaloricen o nos desprecien. Primero yo... Mi vida es una piedra preciosa, soy la única que puede hacer que se destaque su brillo o dejar que se apague para siempre.

Nunca se olviden de que nadie las valorará ni las amará si no piensan en primero yo. 

Hay que valorarnos mujeres cuidarnos tanto físicamente como al igual nuestra salud si no lo hacemos nosotras quien lo hará... Quiérete